Informe del
Clima Cósmico
El Agua Supera al Aire
El Agua Supera al Aire
Por el Astrólogo
Álmico Mark Borax - 8 de Julio
2016
El clima
cósmico de julio del 2016 presenta una ausencia de Aire y una preponderancia de
Agua, indicando que los sentimientos dominarán nuestra capacidad para mantener
una perspectiva clara, neutral. Cuando el Aire disminuye y el Agua aumenta
nuestras facultades mentales quedan relegadas a un segundo plano a medida que
nuestras emociones se apresuran al foco de atención,
Viejos
sentimientos, a veces largamente enterrados y muy cargados, afloran. Cuando
esto sucede en más de una persona por voz, en grupos tal como el caso de
matrimonios, familias y naciones, la intensidad puede ser abrumadora.
Las cosas
se vuelven cada vez más locas en el drama colectivo de nuestro tiempo al que
podemos llamar El Acto Final de una Civilización Falsa. Estamos ante la mayor
disyuntiva de nuestro tiempo y la forma en que enfrentemos este período
determinará el curso del mundo. (Exploro esto en profundidad en el libro
co-escrito con Ellias Lonsdale, Informe del Clima Cósmico: Guía para Tiempos de
Cambios Radicalmente Cambiantes, que se puede solicitar en librerías y en
Amazon).
A medida
que las cosas se calientan aquí y allá, cada uno de nosotros se enfrenta una y
otra vez desde muchos ángulos con la elección de aferrarse a viejas historias
obsoletas o reclamar la nueva historia tratando desesperadamente de elevarse
desde el alma del mundo.
En la
Vieja Historia ustedes opacaron su verdad, amor y Sueño bajo una máscara que
les permitió vivir de incógnito entre todos los que estaban atrapados en la
Mascarada. En la Vieja Historia olvidan que vinieron desde un cosmos milagroso
como un alma asombrada, aquí a la tierra adonde podía sacar fuera su verdad
interna en una explosión radiante que destruye las máscaras. Olvidaron que son
amor y si profundizan lo suficiente, pueden plantar ese amor como una semilla
en un mundo que necesita su amor para crecer más fuerte que el odio que lo
rodea.
En la
Vieja Historia se plegaban a sacerdotes que abusaban de los niños y a políticos
que vendían su país a los Destructores y Debilitadores. Obtenían sus noticias
de los medios corporativos y apoyaban al Partido Demócrata porque pensaban que
era infinitamente mejor que el Republicano. Asumían que estos políticos los
representarían realmente en lugar de prostituirse cediendo al Capital
Financiero.
¿Saben que durante años la Casa
Blanca ha estado sirviendo alimentos puramente orgánicos a la Primera Familia
mientras el Presidente y el Congreso luchan contra el etiquetado de los
movimientos ecologistas y conceden a la Gran Agricultura un pase libre para
violentar la tierra y envenenar a todos los que no puedan costear o no sientan
la necesidad de alimentarse de forma orgánica? En la Vieja Historia ustedes
trataban diligentemente de ir a la universidad adonde podían aprender o
prepararse para una carrera. Creían en profesores y doctores y hospitales y
sacerdotes y presidentes y periodistas y en el congreso.
Pero una fuerza enferma de
avaricia robó la credibilidad de esos guardianes de la sociedad.
Ya no
podemos creer que los médicos que vacunan nuestros niños están del lado de la
verdad. No podemos esperar que los políticos – sean demócratas o republicanos –
nos representen. ¿Cómo pueden confiar en un gobierno que acepta millones de
dólares de Monsanto a cambio de aprobar leyes donde la gente que Monsanto
envenena con cáncer no tiene no tiene derecho a denunciarlos? ¿Cómo pueden
confiar en un gobierno que permite que varias plantas geotérmicas bombeen
desechos en la base de la falla de San Andrés, propiciando el cataclismo de la
costa oeste que seguramente sobrevendrá?
A medida
que muere la Vieja Historia, la Nueva Historia naciente implica un regreso a lo
que es verdadero y real y necesario e inspirador a medida que muchas cosas en
las que creíamos se derrumban. La verdad es que la civilización que muere tenía
que morir porque estaba estrangulando el alma del mundo. Si se apartan de los
medios controlados por corporaciones del país, los espasmos de la democracia
americana se vuelven obvios ante los observadores en muchos países, que mueven
la cabeza en descrédito a medida que los Estados Unidos quedan expuestos como
el Mayor Tonto de Todos.
Pero en las capas de sentimiento
súper cargado enterrado bajo ese viejo tonto, muy profundamente en el acto
final histriónico de una Civilización Falsa, regresa nuevamente una urgencia de
verdad y amor desde la que cual nos erguimos proclamándola en los años 60.
Cuando ya no pueden creer en sus sacerdotes e ídolos es tiempo de encender la
gran irradiación de su alma, unirse a forajidos espirituales de igual
pensamiento y derrotar el reino de abusadores, mentirosos y malgastadores. No hay nada más que perder….
¿Quiénes
son ustedes realmente? ¿Para qué están aquí?
¿Cuánto
tiempo más están dispuestos a esperar? ¡Adelante!
Mark Borax
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